Expectativas bajas y aún así.
Yo anoche me acosté con pocas expectativas para el día de hoy y cuando ha sonado el despertador, la cosa tenía buena pinta: he dormido tapada con mi manta gustosita y razonablemente bien y no me encontraba ansiosa ni más nerviosa de lo razonable. Yo solo esperaba poder reservar una invitación para un concierto gratuito el sábado y que mis alumnos parecieran majos.
Lo primero no va a ser posible porque, aunque las invitaciones se abrían a reserva a las 9, a las 9.01 ya se habían acabado todas. La cara que se me ha quedado y el cabreo ha sido interesante porque ME APETECÍA MUCHÍSIMO. También os digo que me lo esperaba: lo gratis vuela. Pero leñe... Precisamente por eso estaba a las 9 en la página. Pues ni así.
Pero por si eso no fuera poco, tenía una notificación electrónica de un organismo oficial que me ha dado una bofetada en la cara y me ha recordado lo inhumanas que son las instituciones, lo frías y asépticas (y no por ello más justas). No voy a entrar a explicarlo, pero me ha ensombrecido bastante el día, la verdad.
Así que lo siento, queridos futuros alumnos, pero el tono de mi día depende ahora exclusivamente de vosotros. Por si no tuvieseis ya bastante con lo vuestro.
Me alegro de tu regreso, te voy leyendo. Ánimo y un abrazo.
ResponderEliminarEstoy oxidadísima con esto del blog, ¿eh? jaja.
EliminarUn abrazo :)