Perdida.
Hoy he hecho un comentario sobre alguien: "Está perdido en la vida. Pero bueno, tampoco es que sea el único". Y me he partido en dos. Se ha notado un poco, pero no tanto como podría haberse notado. Ha sido una epifanía, ¿sabéis? Como verlo todo claro. O casi. En los últimos tiempos tengo unas rachas de tristeza bastante pronunciadas. No son incapacitantes -soy una persona perfectamente capaz de vivir con tristeza-, pero se me hacen un poco cuesta arriba. Y no entendía por qué me pasaba, y me sentía fatal porque, al fin y al cabo, ¿qué me falta? ¿Por qué me pongo triste? Me enfadaba mucho conmigo misma por no poder señalar razones de peso para esas tristezas tan grandes. Y ya está. Ya sé qué me falta. Me falta orientación. Y por eso me siento perdida. Hasta ahora tenía metas más o menos claras. Pero ya conseguí esas grandes metas. Ahora, por supuesto, tengo metas pequeñitas, propósitos más o menos cotidianos, pero no es lo mismo. Miro a mi alrededor y no sé hacia dónde se