Gracias por tu vida.
Hace tres días una amiga de mi familia recibió una llamada esperada durante mucho tiempo. Le pedían que se fuese rápidamente para el hospital: había unos pulmones para ella. Supongo que intentó contener la emoción y controlar los nervios. Al fin y al cabo no era la primera vez que la llamaban y en la ocasión anterior todo había quedado en nada. Los médicos prefirieron no arriesgarse y esperar a tener mejores opciones.
Pues bien, se ve que el momento llegó, porque esta vez sí, le hicieron el transplante. Todos lo que la conocemos estábamos pendientes de ella, de su operación y del resultado. No es para menos: es una persona vital, alegre, positiva, con ganas de salir adelante a la que un día, sin saber muy bien por qué, empezaron a fallarle los pulmones. Ha pasado muchísimo tiempo pegada a una máquina de oxígeno, con la casa llena de tubos, incapaz de salir a pasear o, en los últimos tiempos, incluso de preparar un café cuando alguien iba de visita a su casa.
Cuando ayer pregunté a mi madre por ella me dijo que ya estaba respirando por sí misma, que los pulmones nuevos estaban funcionando al 100% y que todo el mundo estaba como loco de contento con el milagro.
Sí, bueno, milagro. Depende, claro. El milagro de la ciencia y de los avances médicos. El milagro de una sanidad pública que nos atiende. Y, sobre todo, el milagro de esa persona (o de sus familiares) que decidió que su vida no iba a perderse, que iba a ir a otra persona. O a otras.
Seas quien seas, gracias por tu vida.
No es un milagro, sino el fruto del trabajo y el saber unidos. Eso que tan alegremente se recorta en este país.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Y tanto, menuda pena...
EliminarFelicidades por el milagro. Esa persona y su familia son muy grandes.
ResponderEliminarY tanto que sí :)
EliminarHay cosas que para mí son tan obvias que caigo en el craso error de creer que mi razón es universal. Hace pocas semanas tomando unos vinos con amigos de mi marido salió el tema de la donación. Como me suele ocurrir con los amigos de mi marido, cuando yo creo que ya me han sorprendido al máximo me vuelven a dejar del revés. Un hombre, joven, más joven que yo, decía que él no donaría nada, que él se iba con todo lo suyo para la otra vida. Su mujer al lado de opinión totalmente contraria. En cierto modo resulta que sí, que a veces parece que tenemos que esperar el milagro, el milagro de que haya gente solidaria o el milagro de que la religión no nuble algunas mentes. No sé, a mi me parece tan obvio que si hay alguna vida tras la muerte es precisamente esta: la de dar vida a otros. En fin, lo que digo, que me creo con la razón universal y está claro que no la tengo. Me alegro infinito por esta chica y por tantas y tantas personas que logran vivir gracias a la generosidad de otros.
ResponderEliminarPues sí, yo también me alegro. Voy a investigar para hacerme donante de órganos :)
EliminarDonar para que la vida pueda seguir siendo, no se me ocurre un acto más sencillo y noble.
ResponderEliminarfelicidades por tu amiga, el camino es duro, pero el primer paso ya está dado.
Un beso
Pues sí, y está muy bien y muy contenta. Está recuperándose poco a poco, pero estamos en el camino :D
EliminarRealmente la donación es algo maravilloso.
ResponderEliminarYo siempre he dicho que cuando me muera quiero que donen todos mis órganos (los que sirvan, claro) aunque también es cierto que aspiro a morirme de viejita y no sé si servirán de mucho ya...
Cuando quise donar sangre no pude, pero hace tiempo que pienso en lo de donar médula.
Pensar que puedes ayudar a que alguien viva, tiene que ser muy reconfortante.
Le deseo mucha suerte a tu amgia con sus nuevos pulmones.
Gracias a todos esos donantes y a sus familias, que son capaces de sobreponerse al dolor de perder a un ser querido para ayudar a otras personas. Gracias, gracias y mil gracias
Reitero tus palabras, ¡millones de gracias!
EliminarDe verdad que no somos conscientes de lo importante de la donación de órganos, me alegro por tu amiga y estoy contigo en el papel tan importante que ha asumido la familia del donante, en esos momentos tan duros...
ResponderEliminarBesos !
Y tanto que sí. Debe ser una decisión difícil, quizá, pero me alegro de que decidiesen donar :)
Eliminar¡Qué bonito título!
ResponderEliminarSaber que una parte de alguien querido vivirá en otra persona…
Me alegro muchísimo por tu amiga.
Un abrazo
Pues sí, donar es dar vida :)
EliminarQué bonito ejemplo. Enhorabuena a tu amiga y que le vaya rebonito. Como españoles si hay una cosa de la que tenemos que sentirnos orgullosos es de ser el país número uno en trasplantes. Y de nuestra Sanidad pública. No dejemos nunca que nos la privaticen.
ResponderEliminarNo podemos permitirlo, tienes razón.
Eliminar¡Besos!