Llorar deprisa.

He encendido el ordenador para contaros algo que he visto esta tarde. Era una chica llorando mientras caminaba a toda prisa y cargaba bolsas de supermercado. Pretendía dármelas de intensa y escribirlo bonito para concluir que era una suerte de metáfora de nuestro tiempo. O, al menos, de mi vida. Pero estoy demasiado cansada para ponerme a escribir.

Supongo que ya no hace falta metáfora.

Comentarios

Publicar un comentario

¡Adelante! Deja tu retal :)

Entradas populares de este blog

Cómo aprobé el nivel Avanzado de la EOI preparándome por mi cuenta.

Tontos-a-las-tres.

Libro: La edad de la ira, de Fernando J. López