Serie: Creedme (Unbelievable)





Anoche acabé de ver esta serie en Netflix. Se trata de una miniserie policíaca con capítulos de algo menos de una hora cuyo punto de partida es la caza de un violador.

La serie tiene dos líneas argumentales. Por un lado, dos detectives, Karen Duvall y Grace Rasmussen, que, de casualidad, acaban descubriendo que muy probablemente estén buscando al mismo criminal. Esta parte es la parte amable de la serie. Ver trabajar a estas dos mujeres con dedicación y profesionalidad y con un respeto conmovedor hacia las víctimas hace que hagas un poco las paces con el mundo. Por otro lado, está la historia de Marie Adler, una chica muy joven que ha sido víctima del mismo violador al que las inspectoras están buscando pero con una diferencia: no tiene tanta suerte con los profesionales policiales que la atienden. Y no solo eso: no tiene mucha suerte con nadie. Y esta es la parte más dura de la historia.

Marie, tras los primeros momentos, es puesta en cuestión por todo el mundo. Por sus madres de acogida, por sus compañeros y amigos y también por la policía. Ya sea porque parece estar demasiado entera, porque ha tenido fases de "querer llamar la atención" o porque, simple y llanamente, es más fácil, cómodo y reconfortante creer que estas cosas no pasan nunca cerca, Marie es empujada a retractarse de su declaración y "reconocer" que se lo inventó todo. Ese gesto no solo le vale que todo el mundo la repudie y desconfíe de ella sino que, además, la policía acaba denunciándola por presentar una denuncia falsa, denuncia ante la cual, para evitar la cárcel, tiene que declararse culpable. ¿No es de locos?

Pues sí, es de locos, pero pasa. No solo porque "Creedme" está basado en una historia real, sino porque lo vemos cada día. Recuerdo, inevitablemente, el caso de La Manada, en el que se intentó quitar credibilidad a la víctima con argumentos como que hacía vida normal. Claro, no estaba demostrando con bastante vehemencia que le habían destrozado la vida. Pero también me acuerdo de Diana Quer, de quien, mientras estuvo desaparecida, se dijo de todo: que si su promiscuidad, que si era una chica problemática... Por no hablar de que se airearon todos los trapos sucios de su familia, reales o ficticios.

Cuesta mucho creer a una mujer cuando dice algo que es inconveniente para el sistema. Las respuestas a afirmaciones como "Nos están matando" son significativas y, normalmente, hacen hincapié en que exageramos, que no estaremos tan mal cuando somos capaces de decir esas cosas.

Pero, además de eso, la serie me deja con una reflexión. Tanto Marie como el resto de víctimas tuvieron que someterse, poco después de ser violadas, a exámenes y procedimientos que distan mucho de ser agradables. La diferencia es que Marie tuvo que hacerlo mientras la deshumanizaban. Se habla de que la serie es muy dura, pero yo he sufrido, sufrir de verdad, solamente con el primer capítulo y, a partir de ahí, con retazos de la historia de Marie. Da verdadera angustia la falta de humanidad con la que se la trata en todo momento.

En fin, divagaciones aparte, os recomiendo la serie. Más allá del tema, tiene un ritmo genial, sabe dejarte con ganas de más después de cada capítulo y las actuaciones de las tres protagonistas son SOBERBIAS. Absolutamente.


¿La habéis visto? ¿Pensáis verla?

Un saludo.

Comentarios

  1. Está apuntada desde hace unos días, pero la vida no me da para tanta serie XD

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  2. Cuando iba por el tercer párrafo, ya sabía que se basaba de un caso real, porque supe de él.
    Yo ya sabes que no tengo Netflix :( Y es una pena, porque me llaman las series cortas.
    ¡Un abrazo!

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