Mi amiga Rosa

Hoy en el diario de agradecimiento que estoy llevando desde hace algunas semanas tocaba escribir una carta a un ser querido. Y ostras, a veces me cuesta. No por nada, sino porque para mí lo de "ser querido" como que tiene mucho peso, ¿sabéis? Y hoy pensaba que no iba a saber a quién escribirle. Hasta que he pensado en ella, en mi amiga Rosa.

Cuando publique esta entrada le mandaré una foto de lo que le he escrito, al fin y al cabo, es una carta para ella. Pero mientras escribía se me ha ocurrido que también vosotros deberíais saber cómo es una de mis mejores amigas (a pesar de que nunca nos hayamos visto en persona).

Mi amiga Rosa es, sencillamente, estupenda. Es una persona sencilla en el trato pero con muchísimos matices. Tiene mucho mundo interior y es una fortuna que entrase en mi vida. Le encanta leer, escribe muy bien, tiene mucha mano combinando ropa, es atrevida, estilosa, tiene unos ojos enormes y se parece a Anne Hathaway.

Tiene un talento que escasea: el de escuchar (de verdad) sin juzgar. Cuando tengo problemas suele pasarme que siento que no tengo a quién contárselos (sé que no es verdad, es solo que soy una persona a la que le cuesta abrirse, confiar, molestar...), pero con ella no me ocurre. Es muy reconfortante contarle cualquier cosa (hasta las más vergonzosas, aquellas de las que te sientes culpable) y saber que te va a escuchar, que no te va a juzgar, que no vas a sentir que te quiere menos por eso. Me ha pasado, a lo largo de mi vida, con muy poca, poquísima, gente.

Mi amiga Rosa es una gran madre. Si algún día tengo hijos, me gustaría criarlos tan bien como ella ha criado a su hija. Me encantaría tener la misma relación que ella tiene con su niña (no tan niña). Y, por qué no decirlo, puestos a confesar: me habría encantado tener una madre como ella.

A mi amiga Rosa, seguramente, le esté dando un poco de apuro y vergüenza leer todo esto sobre sí misma, porque es muy humilde y, aunque creo que tiene una autoestima bastante sana, no sabe hasta qué punto es extraordinaria. No del todo.

Mi amiga Rosa es fuerte y humana. Es realista y soñadora. Es desprendida, generosa, creativa, dulce, empática, graciosa y talentosa. Mi amiga Rosa es de las mejores personas que tengo en mi vida.

Soy muy afortunada.

¡Ah, por cierto! Mi amiga Rosa también tiene un blog que ya tardáis en visitar. 


Gracias, Rosa.

Te quiero mucho, amiga.


Comentarios

  1. Bonitas palabras... y enhorabuena a las dos por haberos encontrado.

    ResponderEliminar
  2. Bueno, bueno, bueno... se me han subido los colores y me he quedado sin palabras (y añado lágrimas a mis ojos).
    No sé si soy tan maravillosa como me describes, pero me alegra mucho que lo pienses.
    Yo me siento muy orgullosa de tu amistad. Celebro haberte encontrado. Y deseo que un día podamos darnos un fuerte abrazo. Yo también te quiero mucho, Bettie.
    Gracias, amiga.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegro de haberle puesto un tono bonito -aunque sea rojo-sonrojado- a tu día :)

      Yo también te quiero mucho :)

      Eliminar
  3. Digo lo mismo que Geralt. Enhorabuena a ambas :) Encontrarse gente así es una de las mejores cosas de esta vida.
    Un abrazo!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

¡Adelante! Deja tu retal :)

Entradas populares de este blog

Cómo aprobé el nivel Avanzado de la EOI preparándome por mi cuenta.

Tontos-a-las-tres.

Libro: La edad de la ira, de Fernando J. López