Ventanas.

Siempre me ha inquietado bastante, al llegar a vivir a un lugar, cómo serán mis vecinos. Es cierto que las cosas que los vecinos hagan o dejen de hacer -fumar en el ascensor, sacudir las miguitas por el patio interior, poner la música demasiado alta- son pequeños detalles, pero los pequeños detalles tienen una importancia descomunal.

Por eso me empeñé tanto en ver qué tipo de gente vivía en este edificio antes de comprar el piso. Me costó convencer al dueño, pero finalmente pactamos un alquiler con opción a compra. El trato era muy beneficioso para él y yo, si no me quedaba el piso, perdía bastante dinero, pero decidí que era lo mejor para mi paz mental. 

Por desgracia, poco después de haber comprado el piso, tras vivir en él varios meses, llegó un vecino nuevo. Había comprado el piso de al lado y las ventanas de nuestras respectivas cocinas compartían altura y daban ambas al patio interior. Podríamos habernos estrechado la mano a través de las ventanas, incluso habernos dado dos besos. Pero eso no me apetecía, no me apetecía nada: lo detesté desde el primer momento, cuando el olor de su cigarro se coló en mi cocina, eclipsando el olor del brownie que tenía en el horno. 

Lo detesté durante semanas. Muchas semanas. Hasta que un día me pareció que alguien hacía los coros a Silvio Rodríguez, que sonaba en mi móvil mientras yo fregaba los platos. Cerré el grifo, bajé el volumen. Escuché.

-Pero vecina, ¡si es un temazo! Ojalá pase algo que te borre de pronto: una luz cegadora, un disparo de nieve...

Me asomé, incrédula, a la ventana. Mi cara debía de delatar mi desconcierto, estoy segura, pero aún así, o quizá por eso, se atrevió a invitarme a un café. 

Hoy él ha dejado de fumar y yo alquilo mi piso. 


***

He escrito tanto desamor últimamente... 
Sienta bien creerse estas cosas, aunque sea mientras las escribo. 

Comentarios

  1. ¡¡Qué preciosidad!! A veces la realidad es más bonita que la ficción. ¡Suerte!

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  2. Te mudaste con el vecino???? Uhhhh que lindooooo

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  3. A mí me podría pasar algún día alguna de las historias de tus relatos XD Pero no caerá esa breva...
    ¡Un abrazo!

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