Libro: El libro de Gloria Fuertes. Antología de poemas y vida (por Jorge de Cascante)



Anoche me acabé esta maravillosa antología. Aprovechando los descuentos de la Feria del Libro de la que se ha hecho mi librería de confianza, he encargado unos cuantos tesoros. Este fue el primero. No paraba de ver fotos en las redes sociales cantando sus alabanzas, y me lo tenía que creer, porque cuando Blackie Books se pone, se pone de verdad. Y tratándose de Gloria Fuertes, más tarde o más temprano iba a acabar comprándolo, así que decidí, como decía, aprovecharme del descuento y hacerme con él. No sabéis lo bien que me ha venido. Ha sido, verdaderamente, terapéutico. 

¿De qué va el libro?

Pues Jorge de Cascante nos presenta una antología de poemas en la que se intercalan vivencias o anécdotas de Gloria Fuertes. Estas historias están contadas con cariño, cercanía y delicadeza, como si quien hablase de Gloria fuese un amigo cercano y consiguen hacer redondo del todo un libro que ya tenía papeletas para ser perfecto.

Hablando del libro...

Como ya he dicho, se trata de una antología que, a mi manera de verlo, más que una intención académica, tiene una intención emotiva. No pretende el libro ser una recopilación sistemática de la obra de Gloria, sino crear un clima emocional que quiere homenajear a la poeta (que no poetisa) al mismo tiempo que revivir ese cariño que Gloria provocaba. Los poemas están escogidos y ubicados con un gusto exquisito, acompañan magistralmente a las historias y anécdotas. No se me ocurre cómo podría haberse hecho mejor, la verdad.

He dicho hace un momento que el libro pretende despertar en nosotros ese cariño que ya sentíamos por Gloria Fuertes. Cuando Gloria murió, yo tenía 10 años. No hacía demasiado que le había escrito una carta que iba a mandarle mi maestro, con un poema que yo hice para ella. Y es que yo desperté a la poesía con Gloria Fuertes y sus poemas para niños. Sí, es una manera muy tópica, pero así fue. Así que la adoraba. Cuando me enteré de la muerte de Gloria Fuertes lloré. Fue la primera vez que lloraba por una muerte, y no era la muerte de un familiar (todavía no había experimentado eso), sino la muerte de alguien que admiraba. La carta y el poema quedaron para siempre olvidados en un cajón, ya no sé si el mío o el del maestro. Con esto quiero decir que Gloria era un icono. Probablemente la recordéis como esa abuelita adorable que salía por la tele y que hacía poesías simplonas para niños. Pero Gloria era mucho más que eso y este libro, acertadamente, pretende que nos encariñemos con la Gloria completa y compleja. Con su talante infantil, pero también con su rabia, sus momentos bajos, sus malos vicios, con sus virtudes y sus defectos. Gloria era una mujer, y como tal, era mucho más que esa imagen que conserva de ella el ideario colectivo.

Así que, si quieres saber más de quién era Gloria Fuertes, te recomiendo este libro. En él encontrarás, por supuesto, poemas infantiles, pero también poemas adultos, duros, eróticos, rabiosos, reflexivos, solitarios. Mezclados, sí, porque creo que es como deben estar. 

Pero la cosa es que, además, me he sentido tremendamente comprendida por este libro, o por Gloria, no sé. Al principio se habla de cómo entiende ella la poesía (dice que le viene como el hipo) y de ese ensalzamiento de la espontaneidad poética (mantiene que, cuando corrige un poema, siempre le queda peor que al principio), dos cuestiones que me tranquilizan. No quiero dedicarme a la poesía, ni siquiera se me da bien, pero es cierto que yo también escribo así. Lo bueno o malo que tienen mis poemas es fruto de arrebatos y, tal cual salen, suelen quedarse. Porque son, sobre todo, auténticos en su visceralidad. 

Y no solo me he sentido comprendida en el sentido literario, podríamos decir. También he empatizado muchísimo con los sentimientos de Gloria. Con su manera de sentirse sola, con su manera de sentirse mujer, con su manera de amar... y con su manera de cagarse en todo, también. Con sus luces y con sus contradicciones. Que supongo que esto es pedante, pero así lo siento. No es que quiera yo decir que me parezco a ella, sino que me parece que, por medio de ella, me entiendo mejor. 

Y, por supuesto, me he emocionado. He suspirado, he llorado y he reído con esta antología. Anoche leí, casi al final del todo, un par de cartas que Phyllis, el amor de su vida, y Gloria intercambiaron, y me parecieron tan naturales, tan honestas, tan sinceras... que acabé llorando porque soy idiota

En fin, para que veáis que no exagero, os dejo una imagen de cómo ha quedado el libro tras la lectura.



¿Lo recomiendo? Sin duda alguna. 

Os dejo un trocito...

Poema que luego no podré escribir

Cuando no tenga nada que catar
más que la tierra,
que un hombre rudo me dé la cucharada
(de oficio enterrador), la paletada,
aún con la boca llena de tierra,
seguiré recitando enamorada:
Te quise y aún te quiero todavía,
                         toda viva te amé,
y hoy toda muerta
el timbre de mi voz
llama a tu puerta.

Lo siento, soy así,
algo pesada.


En resumen, este libro...

Y ahora ya veré qué sigo leyendo. Solo consigo mantener el ritmo cuando la lectura me apasiona y, últimamente, no me apasiono fácilmente (lo cuál aún le da más mérito a este libro...)

¡Un beso!

Comentarios

  1. Estaba claro que te iba a encantar.
    Y me has creado la necesidad de leerlo... que lo sepas... ;)

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    Respuestas
    1. Tú no eres muy de poesía, pero si le puedes echar un ojo... Creo que merece la pena...

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  2. Me alegro mucho de que hayas dado con un libro con el que has conectado tanto :) Pero como dice Rosa, es que era apostar sobre seguro :P
    ¡Un abrazo!

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  3. Me ha encantado el "Poema que luego no podré escribir"...

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