Está bien, pero...

Vivir sola está muy bien. Si me apetece fregar los platos, friego, y si no, lo hago más tarde. Si quiero ir desnuda por casa, voy. Me ducho cuando me apetece, sin tener que esperar turnos y sin que se gaste el agua caliente. Entro cuando quiero (o puedo) y salgo cuando me da la gana (o mis obligaciones me lo permiten). Nadie me controla, nadie me supervisa. Y eso está genial. 

Pero. Hay un pero, claro. Y el pero es el mismo que la ventaja: estoy sola. Y, por ejemplo, ahora que estoy enferma, echo de menos alguien pululando a mi alrededor que, de vez en cuando, me pregunte qué tal estoy. Tampoco estoy idealizando el pasado: no creáis que mi santa madre se preocupaba mucho de mí cuando estaba enferma. Pero mi padre sí: al llegar a casa se acercaba y me decía "¿Cómo va eso?". Y, yo qué sé, al menos veía gente ir y venir. Y antes de eso... Bueno, antes fue antes y hace ya mucho tiempo, pero también era distinto. 

Incluso cuando compartía piso (al menos el primer año) y me ponía enferma había alguien que tocaba a la puerta de mi dormitorio y me preguntaba si estaba bien o si necesitaba algo. 

Ahora es otra cosa, claro. Vivo sola, soy una mujer soltera e independiente (me gusta repetírmelo xD), y eso está bien casi todo el tiempo porque no tengo que aguantar las mierdas de nadie, pero ahora, con este constipado que me he cogido, voy arrastrándome del sofá a la cama, de la cama a la mesa de trabajo, de la mesa del trabajo a la cocina y vuelta al sofá sin cruzar la mirada, ni palabras, ni nada con nadie.  Y bueno, a lo mejor estoy exagerando un poco, que podría ser, pero se me antoja una imagen un pelín triste. 

En fin. Que supongo que necesito un gato. 

Voy a ver si me hago otra infusión con miel y me meto en la cama. 






Comentarios

  1. Vaya, veo que al final lo cogiste bien... Espero que te pase pronto y tu ánimo vuelva a remontar, que estar enfermx, y solx, no mola. Y es que, por desgracia, todo tiene sus ventajas y sus desventajas.

    Ánimo, que pronto lo tienes superado. ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y tan bien. Creo que estoy en el punto álgido de mi catarro. Espero, a partir de mañana, empezar a mejorar. Espero.

      Gracias, Geralt :)

      Eliminar
  2. Definitivamente necesitas un gato. Un gato siempre te pregunta cómo estás, ya lo sabes, a veces demasiado.

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. JAJAJA. O no, pero al menos lo ves pasar con indiferencia por delante de ti.

      Me lo estoy planteando fuerte, pero claro, los viajes en vacaciones al pueblo serían un problema, por ejemplo (Don Gato no es sociable, precisamente). Pero creo que necesito un bicho, síp.

      Eliminar
  3. ¡Hola!

    Nunca he vivido sola pero claramente tiene sus ventajas y sus desventajas... cuando estás enferma obviamente te gusta que haya alguien preocupándose un mínimo por ti.
    A ver si te compras un gato jjaja :D

    ¡besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me he planteado adoptarlo más de uan vez, sí xD

      ¡Besos!

      Eliminar
  4. ¡A ver si te curas pronto! Y así sólo quedará lo bueno de vivir sola.
    ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Voy mejorando un poco, pero no sé si llegaré al lunes sana del todo :(

      Eliminar
  5. Hija el gato te da un calorcito estupendo cuando estás malita!! Ya sabes que se huelen los estados de ánimo y los males físicos y mentales.

    A mí, a veces, me gustaría vivir sola. Sola, sola. A ver, que estoy bien así, pero siempre me quedo con la cosita de "si viviese sola ahora mismo..."

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya ves. Gato con todo lo ariscote que es, cuando estaba malucha, no me dejaba a sol ni a sombra :)

      Eliminar
  6. Antes de nada, espero que ya estés mejor del catarro (aunque te hayas tenido que hacer tú la infusión...)

    Te entiendo perfectamente. Pero piensa que, seguramente, también haya gente que vive acompañada pero no le sirve de nada la compañía (no sé si me explico...)

    Y yo también te lo digo: ¡Necesitas un gato!! jajaja

    (no me hagas mucho caso, que hoy estoy un poco "espesa")

    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jajajajaja. Me he echo unas cuantas infusiones XD

      Te explicas perfectamente. Yo, para eso, prefiero quedarme como estoy xD

      ¡Mua!

      Eliminar
  7. Un gato es una companía estupenda!! Ya sabes, necesitas uno ya!!
    Un beso, guapa :)

    ResponderEliminar
  8. Esa sensación no la conozco, nunca viví sola >.<
    Como mucho por unos días, pero no recuerdo si coincidió alguna vez de estar hecha mierda xD
    La verdad es que sí que se está muy bien pero se agradece que alguien venga a ver cómo estás.
    Todos tenemos claro que llegará un gato pronto XD
    Espero que estés mejor :*

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja, ya veremos, ya. Con dificultad cuido de mí misma, con que de un bichillo...

      Eliminar
  9. Yo te entiendo perfectamente. Pero para esos días, recuérdate las cosas buenas que tiene tu situación actual, ponte la tele bajita con un programa cuanto más cutre mejor, túmbate en el sofá, échate una manta por lo alto... y duerme tu constipado.
    Es un pequeño placer de la vida, aunque no siempre lo veamos como tal.
    Que te mejores, un besito!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Los programas de vestidos de novia, esos son mi droga XDDD

      Gracias, bonita.

      ¡Besos!

      Eliminar
  10. Hola!!! Yo también vivo sola!! Aunque es cierto que mi madre vive muy cerca y me ayuda cuando lo necesito. Antes vivia con un novio, y cuando estaba malita pasaba bastante de mi, así que en ese sentido no he notado la diferencia, jajajajaja. Lo que yo aprendí es más vale estar sola, que sentirse sola estando con alguien.

    Un saludito

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí mi madre me queda un poco lejos XDDD Pero bueno, me voy acostumbrando, ¡qué remedio! Tiene muchas cosas buenas, también :)

      Eliminar

Publicar un comentario

¡Adelante! Deja tu retal :)

Entradas populares de este blog

Cómo aprobé el nivel Avanzado de la EOI preparándome por mi cuenta.

Tontos-a-las-tres.

Libro: La edad de la ira, de Fernando J. López