Apedrear tejados.

O de por qué dejé de fingir orgasmos. 


Este no es el tipo de post que suelo escribir. En otros blogs he hablado mucho de sexo y, con frecuencia, no me ha traído nada bueno. Pero resulta que salió el tema en Twitter hace ya algunos días (es que no me da la vida para hacer las cosas con inmediatez, y no me voy a quejar, que ya me quejo bastante) y yo dije que escribiría al respecto. Una chica, con mucha educación, decía que entendía que las mujeres fingiesen (fingiésemos) orgasmos de tanto en tanto por diversas razones. Entonces yo contesté que podía entenderlo, pero que, en mi caso, dejar de hacerlo había cambiado mi vida sexual para mejor. Mucho. Entonces fue cuando dije que lo explicaría en una entrada en el blog. A lo mejor me precipité, pero vamos, dicho está. Además, ayer mismo me lo recordaron. 

Yo he fingido orgasmos, sí. ¿Por qué? Pues principalmente por aburrimiento. Así de simple y así de crudo. En la mayor parte de los casos ni siquiera era por no hundir a mi pareja sexual: era, básicamente, porque estaba aburriéndome como una ostra y quería que aquello se acabase. El orgasmo es una manera de aumentar la excitación de la pareja y acelerar su propio orgasmo. Además, una vez tu pareja cree que has alcanzado el clímax, siente que ha cumplido y se permite dejarse llevar.

¿Cuál es el problema? Es legítimo verlo de otro modo, desde luego, pero yo creo que esta práctica es tirarnos piedras a nuestro propio tejado. No al nuestro individual, que también, sino al de todas las mujeres. A nivel individual, si nuestra pareja cree que lo está haciendo bien, no va a hacer nada por mejorar o, lo que es peor, profundizará en prácticas y actitudes que no nos gustan nada pero que él/ella cree que sí, de modo que la situación, lejos de mejorar, puede que acabe empeorando. Quizá pensemos: "¡Bah! Se trata de una pareja esporádica, no voy a volver a verlo, así que..." Bueno, vale, entiendo que quieras quitarte el problema de encima, porque ese será el problema de otra pero... ¿por qué no empezar a atajarlo? ¿Por qué no compartir con esa persona, con la que, no olvidemos, hemos accedido a tener un nivel de intimidad muy grande, que no nos está satisfaciendo? ¿Por qué no enseñarle a hacerlo? Bien es cierto que cada mujer es un mundo y que puede que lo que le enseñemos no le sirva de mucho con la siguiente pareja, pero quizá sirva para que sea más receptivo o esté más atento a las reacciones de su pareja, o para que le pregunte abiertamente si lo está pasando bien. Y bueno, siendo un poco mala (o un mucho), lo diré: algunos (y en este caso hablo en masculino con toda la intención) necesitan una cura de humildad con urgencia.

Lo cierto es que desde que decidí no volver a fingir un orgasmo (tras escuchar una canción, por cierto) mi vida sexual ha mejorado bastante. Me he preocupado por conocerme más para poder explicar a mis parejas qué me gusta y qué no. Me he convertido en una persona más abierta hablando de sexo, así como practicándolo. Y, por supuesto, lo disfruto más. También es cierto que, junto con la determinación de no fingir más orgasmos, tomé la de no aguantar a ningún torpe sexual sin ganas de aprender. Si no lo estoy pasando bien y mi pareja no quiere esforzarse, se acabó, pero además sin esperas: no soy una ONG.

Y bien, vosotros, y, sobre todo, vosotras, ¿qué opináis del tema? 

Comentarios

  1. Mmmm... interesante tema. Yo también confieso que he tirado en alguna ocasión de mis aptitutes interpretativas para quitarme de encima (o de debajo) a alguno porque estaba cansada, tenía que madrugar y no me parecía educado decirle "a ver si vas acabando, que no tengo toda la noche". Luego no sé si sentirme alagada u ofendida de que, cuando en alguna ocasión confesé que había fingido, no me creyeran, afirmando categóricamente que había sido real (como si yo no notara la diferencia ¬¬). Pero lo cierto es que puedo contar con los dedos de las manos las veces que he fingido, y hace tiempo que dejé de hacerlo, al llegar a la conclusión, como tú, de que les hago un flaco favor engordando falsamente su ego. Pero es que ains...que sensibles me son estos hombres...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja. A mí me ha pasado lo mismo cuando he confesado que había fingido, que no se lo creían. No sé si por su ego o porque soy muy buena actriz XD

      Si ellos son sensibles, yo también, así que... Meh!

      Eliminar
  2. "No soy una ONG". Es que la frase me ha dejado KO jajajajaja
    Pues mira, los fingí en su momento, cuando era jovencita y no sabía bien de qué iba la historia y, básicamente, también porque me aburría. Hasta que aprendes que tienes que hablar y decir y dirigir. Aprendí, aunque no con todos vale, porque hay quien no te permite dirigir o enseñar. A esos adiós muy buenas. Eso no quita que, aunque intentes enseñar y se dejen, a veces los orgasmos no lleguen (menos mal que ocurre poco xDDD). Pero bueno, el camino hay que disfrutarlo siempre y seguir aprendiendo. Porque cada pareja sexual suele ser diferente, aunque haya cosas que se asemejen...
    Yo ya no finjo, nunca. Es que paso, vaya gastada de energía!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es que es verdad, leñe, no lo soy.

      Bueno, a veces no llega el orgasmo, y no pasa nada.Pero si no llega, no se finge, porque tampoco vale de nada.

      Yo también paso ya. No tiene sentido, para mí. :)

      Eliminar
  3. Mi experiencia en eso de fingir orgasmos como hombre es distinta, como es lógico. Yo las veces que lo he hecho ha sido porque no llegaba, mi pareja ya había llegado hacía rato, se aburría y como es raro que un hombre no llegue al orgasmo; en vez de decir "Cariño, mira, no hay manera, pero me ha gustado mucho, de verdad" pues fingía un poco y todos contentos.
    Ya desde el otro lado; no sé si alguna de mis parejas ha fingido algún orgasmo, pero espero que no y menos por torpeza, que enseñando se aprende.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No he conocido muchos hombres -por no decir ninguno- que se hayan visto en esa tesitura. Sin embargo, creo que la argumentación vale igual :P

      Eliminar
  4. Yo creo que no lo he hecho nunca, que yo recuerde. No merece la pena.

    Besos. Te echamos de menos por aquí.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo también os echo mucho de menos. Espero ver pronto la luz al final del tunel :P jaja

      Eliminar
  5. Muy buenas razons, quizás si no existiera la expectativa no nos dejaríamos llevar por todo este asunto de simular por acabar, por no machacar, por no explicar, por...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que hay mucha presión alrededor del tema del orgasmo, y eso no es nada bueno.

      Eliminar
  6. Totalmente de acuerdo...
    Es más... deberíamos hacer carteles, como "Stop Bullying" o "Stop desahucios"... que pongan "Stop figir orgasmos"... Ea
    ;)

    ResponderEliminar
  7. Hombre, yo creo, pero sobre todo espero, que eso vaya con la edad. Cuando eres más jovencitas con pocas experiencias sexuales pues tampoco sabes muy bien por donde van los tiros, que se espera o no de ti, qué es lo que realmente te gusta, etc e imagino que a tu pareja en ese momento le pasará 3 cuartos de lo mismo. Además no estamos, o no nos enseñan, a hablar abiertamente de sexo y aún en la intimidad con esa persona cuesta mucho hacerlo. Pero una vez que vas siendo más mayor o vas teniendo más relaciones, no tiene mayor sentido continuar con esa actitud, no estamos para perder el tiempo!! :D

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ojalá sea así y vaya con la edad. Ojalá XD

      Yo, desde luego, ya no quiero perder el tiempo, ¡es un bien muy preciado!

      Eliminar
  8. A mí no me gusta fingir ni que me finjan.
    Con lo bonito que es el aprendizaje... y lo infravalorado que está. Hay una frase que se dice mucho respecto a la vida: "Lo importante es el camino, no la meta". Pues con el sexo se podría empezar a aplicar igual, digo yo.
    ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues sí, no es una mala idea. Y sí, el aprendizaje es maravilloso en todas las áreas :)

      Eliminar
  9. Pues pienso lo mismo que tú, básicamente. Fingir no he fingido nunca porque siempre me pareció absurdo o quizá sea un poco indiferente a lo que ellos sintieran, si la cosa no ha estado para tirar cohetes pues ya está, tampoco se hunde el mundo. Yo no estoy para reafirmar el ego de nadie. Pero sí que creo que antes de exigir nada al otro (que puede estar más o menos enterado), lo primero que tenemos es que conocernos a nosotras mismas, saber qué nos gusta y qué no. Si tú misma desconoces tu clítoris y cómo funciona, no esperes que el de enfrente sepa más que tú. Si no eres sincera con lo que te gusta, el otro no te va a leer el pensamiento. En eso como en tantas cosas la comunicación es fundamental.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues sí. Hay que conocerse y hablar de las cosas, desde luego.

      Eliminar
  10. Yo con una ex pareja hacía algo "peor", fingía no haberlos tenido para que me dejara tranquila, o simplemente me dejara. Unos meses después de dejarlo tuvimos un encuentro de propina (xD) y cuando él lo dio por terminado le dije que de ahí no se iba nadie hasta que no nos lo hubiéramos pasado bien los dos. Creo que sus amigos y familia tuvieron unas "bonitas" palabras hacia mí tras aquello U.uu

    En otro capítulo (a olvidar) le dije a la otra persona: mira hermoso, si va a ser así siempre yo no vuelvo a quitarme las bragas. No volvió a ser, directamente

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues siendo así, mejor que no volviera a ser XD

      Es el primer caso que conozco de una chica que finge no haber tenido orgasmos xDDD

      ¡Besos!

      Eliminar

Publicar un comentario

¡Adelante! Deja tu retal :)

Entradas populares de este blog

Cómo aprobé el nivel Avanzado de la EOI preparándome por mi cuenta.

Tontos-a-las-tres.

Libro: La edad de la ira, de Fernando J. López