¿Mis defectos o su problema?



mobbing físico
Desde siempre he sido una persona que ha sufrido por su físico, pero poco acomplejada. Me explico: la gente te machaca sin piedad desde que tienes 6 años o antes por cualquier motivo. Si eres gorda, como es mi caso, parece que están intentando desbloquear algún logro sobre hacer la vida imposible a otros. Te insultan en el cole, te ponen motes, el profesor de gimnasia te mira raro, tus familiares te pellizcan los mofletes y te sueltan pullitas, ... La cosa se agrava cuando llegas a la adolescencia y quieres comprarte ropa para salir con tus amigas, ir "a la moda", o simplemente, vestirte según un determinado estilo y no comprar simplemente aquella ropa en la que cabes. Entonces tu madre, entre otras, empieza a decirte que "si no comieras tanto", "si hicieses más nosequé", "si pasases menos tiempo leyendo y más en la calle". Cosas así. Y conforme creces la cosa no mejora, la presión es cada vez mayor y las relaciones afectivo-sexuales suelen agravarlo. Expresiones tipo "yo no toco a la gorda esa ni con un palo" pues no matan, pero hieren. 

En los casos de otras personas que conozco estas cosas han derivado en auto-odio. No en el mío. Yo lo pasaba mal, como ya he dicho, pero nunca, hasta un determinado momento de mi vida que por suerte ya pasó, había sentido desprecio hacia mí misma. De hecho tuve una época, alrededor de los 16-19 años que estaba tan segura y pagada de mí misma - no solo de mi cuerpo, sino de todo lo que yo era - que sé que muchas de mis amigas y conocidas pensaban "¿qué se creerá ésta?". Pero me sentía cómoda, inteligente, guapa, sexy, segura, ... Me sentía bien. A pesar de que el mundo seguía machacándome y recordándome que no iba a desfilar para ninguna firma de alta costura. (Como si eso fuera importante...)

Y no es porque no tuviera "defectos". Desde los 16 años he tenido estrías en el pecho y varices finitas pero muy visibles en las piernas. No es algo que yo pidiese: mi pecho se desarrolló muy rápido y mis piernas llevan con bastante dignidad unas arañas vasculares que son herencia genética de mi madre, que las tuvo desde bien joven. Más tarde, llegaron las estrías en el vientre y las caderas, producto de subidas y bajadas de peso bruscas y no premeditadas.  En fin, que no creo que veáis mi cuerpo expuesto en ninguna revista. Pero mis estrías no me impidieron ponerme bikini y mis varices no me impidieron llevar falda. No voy a morirme de calor por no tener unas piernas de modelo.



Quiero decir... Sí, mis estrías y varices están ahí, pero no me molestan. No me duelen -aunque sé por mi madre que las varices dolerán - ni me piden pan, al menos de momento. Ellas no me agreden y yo no las agredo a ellas. No seré yo la que diga que una persona no haga lo que esté en su mano para cambiar lo que no le guste de sí misma. En fin, creo que cada uno debe ser soberano sobre su cuerpo, pero hasta ahí.  No me insinues que no me queda bien el bikini porque se me ven las estrías o que no me puedo poner falda corta porque se me ven las varices o porque soy demasiado blanca, porque puedo morderte la cabeza. Si a mí no me molestan, y están en mi cuerpo, ¿qué problema puedes tener tú?  ¿Ofenden a tu vista? Pues no mires. Puedes elegir mirar para otro lado que no sean mis estrías o mis varices y todos contentos.

Diréis que es fácil para mí porque no me generaron un complejo. Y en parte tenéis razón. Estos rasgos de mi físico no me plantean ni me han planteado problemas hasta hoy. Pero otros sí. Por ejemplo, a fueza de repetírmelo, me hicieron creer que las minifaldas no son para las chicas con muslos gordos, así que las faldas más cortas que llevaba estaban justo por encima de la rodilla. Pero eso también me lo salté y asumí que quien decidía como vestirse era yo. Me compré un vestido minifaldero y me lo puse. Y me miré, y remiré. Me sentía rara, la verdad, la idea de que no era para mí no paraba de revolotear en mi cabeza, pero le dí una patada y volví a mirarme de nuevo: "Ey, chica - me dije- no estás nada mal". Había ganado a uno de mis complejos. Me sentía pletórica, feliz, libre. Es cierto que desde aquel momento me he puesto minifalda en muy contadas ocasiones, pero no por el complejo, sino porque no es una prenda muy cómoda para mí. :P

Por suerte he conseguido disociar si las cosas de mi cuerpo que se consideran defectos no me gustan a mí o no gustan a los demás. Si son un inconveniente para mí, o para los demás. Si el problema es mío, intento solucionarlo. Si el problema lo tienen los demás, los que tienen que cambiar son ellos, no yo.

Comentarios

  1. ¡OLE TÚ! Ojalá más gente pensase igual, seríamos todos mucho más felices sin complejos y usando la libertad de expresión para algo que no fuese criticar e intentar hundir a los demás. Yo pienso que mucha gente que critica e intenta establecer unas normas de "moda" intentan proyectar sus inseguridades en los demás. Por ejemplo a mi me dicen que no puedo ponerme piratas porque soy bajita y lo del bikini que no sea recto por mi forma ni con volantes por no sé que mierda de la cadera, tampoco puedo pintar la forma de mis ojos de tal manera y el pelo me queda mejor no sé cómo por no sé que de mi cara redonda, etc, etc, etc. Me seca la vida tanta gilipollez.
    Por llamar gordas, enanas, feas, estúpidas o "guarras" a las demás no le convierte a nadie en más delgada, esbelta, guapa, inteligente o "decente" sólo fomenta la inseguridad y la autofobia.
    A mi me ha encantado esta entrada, me ha encantado como piensas y me has encantado tú.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Eva. Yo creo que hay -evidentemente- cosas que nos favorecen más y menos a cada una, colores, prendas... etc. Y una cosa es aconsejar y la otra dictar norma y prohibir. Y en cualquier caso, si quiero ponerme algo que SEGÚN TU me queda mal, pues es mi problema, ¿no? La que va a ir mal vestida soy yo. En fin. A mí me decían que no me cortase el pelo tipo bob, que iba a estar fea... pues yo me veía guapísima niña. Yo que sé. Me quedo con eso de que rebajar a otro no te va a hacer mejor. Es una idea muy acertada.

      Eliminar
  2. Pues muy bien dicho, di que si! En esta sociedad en la que todo esta estereotipado es importante no dejarnos influir por las modas esteticas. A veces cuesta un poco lo reconozco, porque la gente es muy cruel en general, pero si algo he aprendido en estos años es que con el tiempo se aprende a relativizar y a darle la importancia justa.
    Yo tengo estrias, manchas, estoy gordita y un largo etc de defectos, pero sinceramente no me importan demasiado porque me gusta como soy y no me cambiaria por nadie. Lo unico que intento es resaltar lo que me gusta de mi para verme lo mejor posible y ya esta.
    Lo que piensen los demas poco importa asi que haces bien en no preocuparte por eso. Si te quieres poner minifaldas o no es solo cosa tuya y de nadie mas. Acaso no todos tenemos defectos??
    Besos wapa

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si solo las personas perfectas pudieran ponerse minifaldas o bikinis, muchas empresas se iban a arruinar XD Pues sí, hay que relativizar y poner en perspectiva lo que se supone que son tus defectos. Solo son tus defectos si los concibes como tal: para muchos, ser blanca de piel es un defecto. Para mí es mi manera de ser, por ejemplo.

      Eliminar
  3. Bettie, solo te voy a decir una cosa: ojalá hubiera más personas como tú

    (K)

    ResponderEliminar
  4. Sabes que me encanta tú cabecita linda...eres genial preciosa¡¡¡¡¡

    ResponderEliminar
  5. Admiro tu madurez y sensatez, en el momento en que algo a mejorar se convierte en un arma de destrucción masiva es cuando los complejos e inseguridades deberían extirparse de nuestro pensamiento y de la valoración ajena.

    Si me permites la licencia, me arriesgaré y te diré que tal vez aprendiste a respetarte porque otros no lo estaban haciendo como necesitabas, me explico: la influencia que tienen los demás sobre nuestra autoestima termina cuando la percibimos como un ataque, por muy bienintencionado que sea.

    He conocido a gente cuyos más arraigados complejos provenían de haberse sentido perfectos, o haber sido educados como tal, y después su ego idealizado choca frontalmente con los cánones sociales o las críticas subjetivas. Parece que tú forjaste tu autoestima desde el defecto negativo, que conocías y tenías presente de manera prematura, y tuviste la valentía y la fortaleza de redescubrirte para valorar lo positivo. Espero que tu camino me inspire :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues nunca lo había pensado.Algo de eso habrá, supongo, quizá mucho. Pero también dependen un poco del carácter que uno tiene y de los mecanismos de "supervivencia" que activas. La mente humana puede salvarte o destruirte, la verdad. Y la mía hasta el momento parece bastante resistente, por lo menos en lo relacionado con esto xD

      Eliminar
  6. Enhorabuena. Sinceramente. Es algo muy complejo conseguir una autoestima más o menos estable y mantenerla a raya, para todo el mundo, no sólo para las que no entramos en el canon típico.
    No soy la más indicada para dar consejos, soy una autoterrorista por épocas, me castigo a menudo y casi siempre por temas relacionados con el físico. Aunque he mejorado con los años y he hecho cosas que de joven ni se me pasaban por la cabeza (como ir a la playa o ponerme minifalda), todavía me quedan muchos pasos por dar. Está claro que es un camino que hay que recorrer poco a poco, donde a veces se retrocede, pero al final merece la pena.
    Me alegro de corazón que esas mierdas no te afecten, que seas lo suficientemente madura como para diferenciar una opinión de una verdad absoluta, que no te dejes llevar por unos patrones subjetivos e inventados...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Autoterrorista... Es un buen palabro. Amos, me afectan, como a todo el mundo, pero cuando se me pasa la mala leche o el berrinche, los mando a freir espárragos y no me autoboicoteo, Porque no.

      Eliminar
  7. Esto es una mujer de verdad pero sobre todo un ser humano valorado por lo que es,que no es un robot mas que muere por ser un pellejo de revista sin corazon
    Gracias por SER

    ResponderEliminar
  8. Atte un hombre que esta tan conectado con su ser como la belleza que escribio aqui

    ResponderEliminar
  9. Trasteando en el blog, he llegado a este post, y te digo lo mismo que ya te han dicho: muy bien, muy valiente. Eso sí, mientras no te cause problemas de salud.
    El que la sociedad se invente un ideal de belleza imposible de conseguir (hasta a las modelos les hacen Photoshop) es una forma más de opresión de la mujer.
    Hay una obra de arte contemporánea, de Barbara Kruger, cuyo título me gusta más que la obra en sí (postmodernismo, nada del otro mundo): Tu cuerpo es un campo de batalla (1989). Hacen falta más mujeres como tú que no permiten eso, que su cuerpo se convierta en un campo de batalla de intereses ajenos a los tuyos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, estudiamos esa obra en la carrera. Y coincido contigo: me gusta mucho más el concepto y el título que la obra en sí. Creo que es difícil que nuestro cuerpo deje de ser un campo de batalla por completo, pero me parece que sí podemos regular, en parte al menos, lo cruento del combate :)

      ¡Besos!

      Eliminar

Publicar un comentario

¡Adelante! Deja tu retal :)

Entradas populares de este blog

Cómo aprobé el nivel Avanzado de la EOI preparándome por mi cuenta.

Tontos-a-las-tres.

Libro: La edad de la ira, de Fernando J. López